Ntra. Sra. de la Paz
Historia de la fundación del Monasterio de Nuestra Señora de la Paz
Nuestro Monasterio fue fundado por la Abadía Cisterciense de Santa María de San José, situado en Alloz, Navarra.
Nuestra Casa-madre, considerada la primera “trapa femenina “en España, fue fundada en el año 1884 por el hoy Beato Cardenal Ciriaco Mª Sancha y Hervás, en aquel tiempo Obispo de Ávila, en un lugar llamado Tiñosillos. Debido a lo insalubre del lugar y a la falta de asistencia espiritual la Comunidad se trasladó a Alloz en Navarra, en octubre del año 1914.
Este lugar de Alloz era una antigua granja perteneciente al Monasterio Cisterciense de Iranzu y que tras la desamortización de Mendizábal en 1835 estaba en manos de seglares. Las monjas compraron los terrenos y los edificios existentes, que habilitaron para poder vivir la vida monástica.
En el año 1922 la Comunidad de Alloz fue admitida oficialmente en la Orden Cisterciense de la Estrecha Observancia. En el año 1942 es elegida Abadesa la Madre Puy Echalar, bajo cuyo mandato iba a prosperar la Comunidad, material y espiritualmente, tanto es así que en el año 1967 el Abad General de la Orden, Dom Ignacio Gillet, en su gira por España visitó también el Monasterio de Alloz y se encontró una Comunidad floreciente -80 monjas- y comentó con la Madre Abadesa la conveniencia de hacer una fundación.
Una vez aceptado el proyecto por la Comunidad comenzó la búsqueda de lugar para la nueva fundación año, 1970-71. Madre Puy, Abadesa, acompañada de Madre Pilar, futura Superiora de la fundación, y Madre Cecilia, secretaria, recorrieron parte de España y al fin decidieron fundar en Murcia, al aparecer en escena dos personas providenciales: Francisco López, y Doña Josefa Atienzar .
El primero, gran entusiasta de la vida cisterciense, puso en contacto a las fundadoras con el Sr. Obispo y con el diario “La Verdad” de Murcia, que publicó un artículo y una foto de las tres monjas en la puerta de la Catedral de Murcia; este periódico llegó a manos de Doña Josefa a través de una tía suya, Doña Aurora, que sabía que su sobrina tenía proyectado construir un colegio de religiosas para niñas en sus propiedades del Campo de Cartagena.
Después de un tiempo de reflexión, Doña Josefa, mujer de fe profunda fe, que buscaba la voluntad de Dios ante todo, decidió donar sus terrenos y sus bienes para la construcción de un monasterio de vida contemplativa.
Las obras del nuevo monasterio comenzaron en agosto del año 1974 y para su dirección la Madre Puy envió dos hermanas, Madre Pilar y Hermana Blanca. El monasterio por fin quedó terminado, no sin grandes dificultades. Tres hermanas más vinieron en este tiempo
para preparar todo y el resto de la Comunidad llegó el 20 de noviembre de 1976, un total de 13 hermanas , tal como San Benito pide para una fundación: 12 hermanos con un Superior al frente.
El día 1 de enero de 1977 a las 4 de la tarde tuvo lugar la inauguración del monasterio. Doña Josefa decidió vender su casa de Murcia para la construcción de la Iglesia del monasterio y venirse a vivir en la hospedería donde se habilitó un pequeño apartamento para ella. Aquí vivió hasta su muerte el día 11 de agosto de 1984. La Iglesia fue consagrada el 9 de abril de 1978. El Capítulo General de ese mismo año concedió la autonomía a la Comunidad, las hermanas hicieron el voto de estabilidad y a continuación eligieron su primera abadesa: Madre Pilar Morrás, que había sido desde el comienzo Superiora de la fundación. Y así comienza la andadura de nuestra Comunidad.
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